México es el único país fuera de China donde BMW se aventuró a vender una versión sedán del Serie 1. En teoría, no compite contra la versión hatchback, pero la similitud entre sus precios despertó nuestra curiosidad: ¿cuál de los dos Serie 1 disponibles en México ofrece más valor por tu dinero?
Tomaremos a las versiones 118i de ambos modelos. En el caso del Serie 1 Sedán, sólo está disponible con el paquete M Sport y tiene un precio de $600,000. El Serie 1 Hatchback ofrece esta configuración en paquetes Sport Line y M Sport, con precios de $599,900 y $629,900, respectivamente.
La frescura habla en favor del hatch
Empecemos por el diseño. Es verdad que se trata de un tema subjetivo, sin embargo, el Serie 1 hatchback lleva las de ganar por haber sido desarrollado más recientemente; se estrenó a nivel mundial a mediados de 2019, mientras el Serie 1 sedán nació en China en julio de 2016. Eso sí, el sedán incluye de serie el paquete deportivo M Sport; en el hatchback hay que pagar $30,000 extra.
El tiempo también habla en favor del hatchback cuando tratamos interiores. El diseño del tablero y de varios componentes va más a tono con los últimos lanzamientos de la marca. Además, sin demeritar la manufactura china de BMW, la calidad percibida en el hatchback fabricado en Alemania es notablemente superior.
Más espacio en el sedán, mejor tecnología en el hatch
Ambos modelos fueron desarrollados a partir de la misma plataforma de tracción delantera, que también se comparte con modelos de MINI y algunos SUV de BMW, por eso no es coincidencia que sedán y hatchback tengan una distancia entre ejes de 2,670 mm. Las dimensiones finales varían en 14.3 cm adicionales en el sedán, para albergar una cajuela más amplia... aunque sólo son 45 litros de diferencia respecto al hatchback.
El equipamiento vuelca la balanza completamente hacia el hatchback. Cuesta 100 pesos menos —sí, cien— y suma todo esto: cuadro de instrumentos digital, infotenimiento con la nueva interfaz de BMW, información de tráfico en tiempo real, asistente de estacionamiento automático, un asistente que recrea tus movimientos 50 metros en reversa, sensor de proximidad delantero y sistema de sonido de 10 bocinas. Eso sí, su climatizador es de sólo una zona; en el sedán es de dos.
Mismo motor, desempeño distinto
Al hablar de motores sucede algo muy curioso. Ambos utilizan el mismo motor turbo de tres cilindros y 1.5 litros, capaz de generar 140 hp y 162 lb-pie, y apuestan por una transmisión automática de doble embrague de siete velocidades. Además, en báscula, sólo hay una diferencia de 10 kg. Su desempeño, sin embargo, es muy diferente.
Al BMW 118i hatchback le toma sólo 8.5 segundos llegar a 100 km/h, mientras el sedán lo hace en 9.4 segundos. Al hablar de consumos también hay diferencias importantes. El hatchback reporta un promedio combinado de 17.9 km/l, superior a los 16.6 km/l que anuncia el sedán. En emisiones, el Serie 1 sedán emite 10 gramos más de CO2 cada kilómetro.
En lo que respecta a comportamiento, hay una diferencia importante a destacar. Comparten plataforma y las sensaciones son, hasta cierto punto, parecidas, sin embargo, la versión M Sport del hatchback —sólo $30,000 más cara que el sedán— suma una suspensión deportiva y un chasís rebajado 10 mm, lo mejora las sensaciones al volante.
El Serie 1 hatchback pone en jaque al sedán
La nueva generación del BMW Serie 1 hatchback nos dejó muy buen sabor de boca por la sensación de calidad, el equilibrio en su manejo y el alto grado de tecnología. El sedán hereda algunas de sus cualidades dinámicas, pero queda rezagado en materia de acabados y equipamiento.
En sus configuraciones específicas para México, el Serie 1 Sedán tiene la ventaja de ofrecer un motor de 192 hp, que por el momento no está disponible en el hatchback. Entre las ventajas del hatch es que hay mucho equipamiento opcional, tanto estético como tecnológico, para crearlo a nuestro gusto.
Al final, BMW pone opciones compactas para distintos tipos de necesidades y gustos: sedán, hatchback o coupé —pensando en el Serie 2. Este año llegará a nuestro mercado el Serie 2 Gran Coupé, que no es más que un Serie 1 de cuatro puertas para competir contra el Mercedes-Benz CLA. La pregunta es, ¿convivirá con el Serie 1 sedán o lo reemplazará?
